Recomendaciones de vacunación contra la gripe estacional y COVID-19 para personas con síndrome de Down

Con la llegada de la temporada de otoño e invierno es fundamental reforzar el sistema inmunológico de las personas que forman parte de los grupos de riesgo, como es el caso de las personas con síndrome de Down. Debido a que su sistema inmunológico puede ser más vulnerable, tienen un mayor riesgo de complicaciones si se infectan con la gripe o con otras enfermedades respiratorias.

Vacunación contra la GRIPE

Desde DOWN ESPAÑA, junto con el Comité Médico Asesor y en línea con las recomendaciones oficiales de la Comisión de Salud Pública, recomendamos la vacunación anual contra la gripe estacional para todas las personas con síndrome de Down mayores de 6 meses. Esta vacuna es especialmente importante para reducir el riesgo de complicaciones graves en caso de contagio y minimizar los posibles efectos a largo plazo.

Cabe destacar que para la población entre 2 y 7 años la vacuna es mediante insuflación intranasal, no es inyectada.

Vacunación contra el COVID-19

Este año, el Ministerio de Sanidad ha separado las pautas de vacunación de la gripe y del COVID-19. La vacunación frente al COVID-19 sigue siendo importante y se administra según la situación epidemiológica y los grupos de riesgo. Es crucial que cada persona consulte con su médico de referencia, ya que la recomendación puede variar según la situación y las características de cada persona.

No obstante, la recomendación general para personas con síndrome de Down es vacunar a todos los mayores de 12 años.

Vacunación simultánea

Las vacunas contra la gripe y el COVID-19 se pueden administrar de manera simultánea, salvo que el médico indique lo contrario.

Virus Respiratorio Sincitial (VRS)

El Virus Respiratorio Sincitial, causante de la bronquiolitis, es otro riesgo significativo para las personas con síndrome de Down menores de 24 meses, especialmente en los meses de frío, y responsable de gran parte de los ingresos hospitalarios graves.

Ahora se va a incluir ya de manera rutinaria en las campañas de vacunación, a los recién nacidos, y menores de 2 años pertenecientes a grupos de riesgo como es el síndrome de Down. Por eso es importante que las familias consulten con su pediatra.

No es tal vacuna sino que es otro tipo de inmunización, pasiva, mediante anticuerpos monoclonales (Nirsevimab).

Sí que existe una vacuna frente al VRS, no indicada en niños, y que se recomienda para mayores de 60 años que viven en centros residenciales.

Recomendaciones para el entorno cercano

Es importante vacunar a las personas con síndrome de Down, pero también a su entorno cercano. Se recomienda que familiares, convivientes, amigos y profesionales de la salud también se vacunen, especialmente aquellas personas de edad avanzada o con otros factores de riesgo.

La campaña de vacunación suele comenzar entre finales de septiembre y octubre, aunque las fechas exactas pueden variar dependiendo de la Comunidad Autónoma. Dado que cada Comunidad tiene su propio calendario de vacunación, es importante consultar con el médico de referencia para estar al tanto de las fechas y las pautas específicas.

Por último, les recordamos presar atención a los calendarios autonómicos, ya que pueden haber actualizaciones o cambios en las recomendaciones para otras vacunas importantes, como las de neumococo o rotavirus.

Para más información, pueden consultar el documento oficial de vacunación: Recomendaciones de Vacunación 2025-2026.

Una buena alimentación mejora la salud y el rendimiento cognitivo en personas con síndrome de Down

Hoy 16 de octubre, Día Mundial de la Alimentación Saludable, recordamos la importancia de una dieta rica en proteínas de calidad, verduras, cereales integrales y grasas saludables. No sólo para prevenir la obesidad en personas con síndrome de Down, para la que son más propensas que el resto de la población, sino además para mejorar su capacidad cognitiva.

Así lo evidencia el estudio europeo GO-DS21, en el que participan el Hospital del Mar Research Institute y el Centro de Regulación Genómica (CRG). Las primeras conclusiones se presentaron el pasado 21 de marzo con motivo del Día Mundial del Síndrome de Down.

GO-DS21 es una iniciativa de investigación internacional (programas científicos europeos HORIZONTE). Cuenta con la participación de doce centros de seis países europeos y analiza los factores genéticos, epigenéticos y ambientales que influyen en la salud de las personas con síndrome de Down, especialmente la relación entre obesidad y función cognitiva.

Entre sus principales conclusiones, se destaca que una alimentación rica en nutrientes de calidad se asocia a mejores puntuaciones en los test de coeficiente intelectual.

Además, se explicó que los hábitos alimentarios de las familias —especialmente de las madres— influyen directamente en la alimentación de las personas con síndrome de Down. Es algo muy relevante teniendo en cuenta que, según señaló en la presentación del estudio la experta Mara Dierssen, líder del Grupo de Neurobiología Celular y de Sistemas en el CRG, “en el síndrome de Down encontramos una predisposición genética a la preferencia por los alimentos dulces o alimentos de alto contenido en grasa».

Por su parte, el Dr. Rafael de la Torre, también investigador del proyecto, destacó que: “los resultados del estudio ofrecen nuevas perspectivas sobre los factores complejos que contribuyen al sobrepeso y a la obesidad en individuos con síndrome de Down, indicando que una combinación de intervenciones dietéticas y de estilo de vida saludable puede resultar beneficiosa no solo para prevenir la obesidad sino también para mejorar su rendimiento cognitivo».

En próximas semanas esperamos realizar un Webinario con miembros del equipo investigador para poder profundizar y explicar en detalle estas conclusiones.

Para más información sobre salud y alimentación en personas con síndrome de Down, puedes consultar estos recursos de DOWN ESPAÑA:

Miranza y Down España se unen para mejorar la salud visual de las personas con síndrome de Down

El 75 % de las personas con síndrome de Down presenta problemas visuales. Los más comunes son los derivados de defectos refractivos —como la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo—, además del estrabismo y las cataratas.

Sin un seguimiento oftalmológico adecuado, estas afecciones pueden perjudicar de forma significativa al desarrollo cognitivo, la comunicación y la autonomía personal. Hay que saber que las patologías oculares suelen evolucionar más rápido en las personas con síndrome de Down. Por ello, resulta fundamental contar con protocolos de detección precoz y con profesionales capacitados para ofrecer una atención adaptada a sus necesidades específicas.

Con el objetivo de mejorar la salud ocular que de las personas con síndrome de Down y otras discapacidades intelectuales, en DOWN ESPAÑA hemos firmado un acuerdo con Miranza, el grupo oftalmológico líder en nuestro país.

Esta colaboración contempla una sesión formativa para familiares de pacientes con síndrome de Down en la que se abordarán las principales patologías oculares y su posible tratamiento. Además, todos los usuarios de alguna de nuestras entidades federadas tendrán un descuento del 20% en las clínicas del grupo Miranza (basta con solicitar cita en la página Web del Grupo y mencionarlo). También contarán con la posibilidad de hacer consultas y recibir orientación sobre temas relacionados con la salud ocular. Para ello, las familias pueden escribirnos un correo con su consulta a downespana@sindromedown.org, y les pondremos en contacto con expertos oftalmólogos de Miranza.

Agustín Matía, director gerente de DOWN ESPAÑA, señala la importancia de este convenio para la mejora de la calidad de vida de las personas con síndrome de Down: “La salud visual es un aspecto fundamental del bienestar general y de la funcionalidad de vida. Este acuerdo con el grupo Miranza, a quienes agradecemos su compromiso, nos permitirá mejorar y mantener la salud ocular de las personas de nuestro colectivo».

Por su parte, Ramón Berra, director general de Miranza, explica: «poder poner al servicio de este colectivo nuestro conocimiento médico, nuestra red de clínicas especializadas y el trabajo conjunto con una entidad de referencia, nos permitirá ofrecer una atención de mayor calidad, pero también impulsar una transformación en la forma en que el sistema sanitario se relaciona con las personas con discapacidad intelectual”.

Para más información sobre la salud oftalmológica de las personas con síndrome de Down, recomendamos nuestro Programa Español de Salud de Personas con Síndrome de Down, disponible haciendo click aquí.

Dra. Ortega: “La salud mental debe ser parte integral del seguimiento médico de las personas con síndrome de Down”

Afortunadamente, la salud mental ha cobrado relevancia en los últimos años y la sociedad empieza a prestar más atención a un aspecto clave del bienestar general.

En el marco del Día Mundial de la Salud Mental, en DOWN ESPAÑA entrevistamos a la doctora María del Carmen Ortega, psiquiatra especializada en síndrome de Down y miembro del Comité Médico Asesor de DOWN ESPAÑA, para profundizar en el bienestar mental de las personas de nuestro colectivo, en las barreras que siguen existiendo en el ámbito clínico y social y en los avances necesarios para garantizar una atención verdaderamente inclusiva en este ámbito.

¿Cuáles son las afecciones de salud mental más frecuentes en personas con síndrome de Down y cómo suelen manifestarse?

Las patologías más comunes en este colectivo incluyen: los trastornos adaptativos secundarios a factores psicosociales adversos o cambios vitales, los trastornos de ansiedad, la depresión, el trastorno obsesivo-compulsivo y las alteraciones del comportamiento.

Las tres primeras pueden manifestarse como miedos intensos, evitación de situaciones, síntomas físicos en forma de somatizaciones ansiosas, un estado de ánimo decaído, retraimiento social, pérdida de interés en actividades que antes disfrutaban, cambios en el apetito o el sueño y una afectación o disminución del lenguaje verbal comunicativo.

¿Por qué considera que todavía existe cierta invisibilización sobre este tema?

La tendencia a silenciar el ámbito de la salud mental en personas con síndrome de Down se debe a múltiples factores.

En primer lugar, existe una falta de formación especializada entre los profesionales de la psiquiatría y de la psicología para atender adecuadamente a personas con discapacidad intelectual. Además, los estigmas sociales y culturales tienden a minimizar o malinterpretar los síntomas emocionales, atribuyéndolos erróneamente a la discapacidad en sí.

Las dificultades en la comunicación también impiden que las personas expresen lo que sienten, lo que complica el diagnóstico. Asimismo, la percepción, explícita o implícita, de que no resulta relevante intervenir ante una alteración mental en personas con discapacidad intelectual, bajo el supuesto de que su calidad de vida está irremediablemente limitada, contribuye a la desatención. Esta actitud puede llevar a una infravaloración de las posibilidades de mejora y bienestar, perpetuando la idea errónea de que cualquier intervención carece de sentido o impacto en su vida cotidiana.

¿Cuáles son los factores de riesgo más comunes que pueden desencadenar una afección de salud mental en una persona con síndrome de Down?

Son factores muy variados. Por un lado, destacan los cambios importantes en la vida, como los duelos, las mudanzas o la pérdida de rutinas, que pueden generar un gran impacto emocional. También es fundamental considerar problemas médicos no diagnosticados, como el dolor crónico, el hipotiroidismo o la apnea del sueño, que a menudo pasan desapercibidos y pueden manifestarse como alteraciones conductuales o emocionales.

 Además, los entornos poco estimulantes o incluso excluyentes, así como la falta de oportunidades para la autonomía y la participación social, incrementan el riesgo de desarrollar síntomas como estrés, ansiedad o depresión.

Todo esto se ve agravado si la persona no cuenta con un entorno de apoyo que facilite su crecimiento y la adaptación a los cambios o la resolución de dificultades.

Por eso, es esencial prestar atención tanto a los factores médicos como a los psicosociales y promover entornos que favorezcan el bienestar integral de las personas con síndrome de Down.

¿Qué señales de alarma deberían tener en cuenta las familias y profesionales para detectar a tiempo posibles patologías?

Las señales de alarma incluyen cambios repentinos en el comportamiento o el estado de ánimo, pérdida de habilidades previamente adquiridas, aislamiento social o disminución de la comunicación, alteraciones en el sueño, apetito o higiene personal, y aparición de conductas repetitivas. También se debe prestar atención a la disminución del interés por actividades que antes disfrutaban, la irritabilidad persistente y la apatía.

Estas señales pueden indicar la presencia de una alteración psiquiátrica que requiera una evaluación especializada.

 -¿Qué papel juega la prevención en el bienestar emocional de las personas con síndrome de Down?

La prevención es fundamental para promover el bienestar emocional. En este sentido, destaca la importancia de mantener rutinas, ofrecer apoyo emocional especialmente ante cambios o circunstancias adversas, educar sobre emociones, habilidades sociales y tolerancia a la frustración, detectar tempranamente síntomas físicos y psicológicos, y crear entornos saludables.

La prevención también implica fomentar la autonomía, la participación activa en la comunidad y el acceso a actividades significativas que refuercen la autoestima y el sentido de pertenencia.

¿Qué papel tiene la identidad en la salud mental de las personas con síndrome de Down?

El término identidad hace referencia al conjunto de características que hacen que una persona se perciba a sí misma como única y diferente de los demás.

Una identidad positiva fortalece la salud mental en cualquier individuo.  Es esencial que la persona se reconozca como digna y valiosa, tenga espacios para expresarse y ser escuchada. La construcción de una identidad sólida implica el reconocimiento y la aceptación de las propias limitaciones, así como de las capacidades de desarrollo. Cuando apoyamos a las personas con discapacidad intelectual para que desarrollen su identidad, les ayudamos a fortalecer su autoestima y, por lo tanto, su salud mental.

¿Cómo influye el entorno (asociación, centro de estudios, amigos…) en la salud mental de las personas con síndrome de Down?

El entorno tiene un impacto directo en la salud mental en cualquier individuo. Un entorno que favorezca la propia valía y dignidad de cada persona, su adaptación y aceptación con sus limitaciones y fortalezas, y el sentido de pertenencia, estimula y motiva al bienestar emocional, reduce el estrés y la ansiedad.

Los diversos entornos que tengan relación con una persona con discapacidad intelectual deberían ofrecer oportunidades en un ambiente respetuoso, accesible y enriquecedor. En este sentido, es fundamental reconocer que las personas con síndrome de Down aportan valores esenciales a la sociedad, como la empatía, la generosidad, la autenticidad, la alegría y la capacidad de generar vínculos afectivos profundos, entre otros.

¿Qué barreras existen actualmente para que las personas con síndrome de Down accedan a apoyo psicológico o psiquiátrico adaptado a sus necesidades?

Las principales barreras incluyen la escasez de recursos en términos de profesionales, centros y unidades, especializados en el ámbito de la psiquiatría y la psicología en personas con discapacidad intelectual y, en concreto, en personas con síndrome de Down.

Además, existe una falta de conciencia sobre la importancia de su salud mental, y en muchos casos no se diagnostican adecuadamente los trastornos que puedan presentar. Incluso cuando se realiza un diagnóstico, este puede ser erróneo o incompleto, lo que conlleva que no se les proporcione la modalidad de tratamiento más adecuada a sus necesidades específicas.

Bajo su punto de vista, ¿deberían formar parte habitual de los equipos de revisión médica de las personas con síndrome de Down los profesionales de salud mental?

La salud mental debería ser un aspecto integrado en el seguimiento médico habitual de las personas con síndrome de Down. No implica que todas deban ser valoradas por un especialista en psiquiatría, sino que sus médicos de referencia estén capacitados para explorar alguna posible alteración en su estado emocional.

En caso de detectar indicios de alteración, se podría valorar la derivación a psiquiatría u otros profesionales especializados, favoreciendo así una atención temprana, coordinada y adaptada a las necesidades individuales.  

¿Qué ideas clave consideras imprescindible transmitir a familias y profesionales sobre la salud mental en el síndrome de Down?

Las ideas clave incluyen que la salud mental es tan importante como la física; que las personas con síndrome de Down pueden experimentar alteraciones emocionales o del comportamiento susceptibles de ser tratadas; que la detección temprana y el apoyo adecuado marcan una diferencia.

Es fundamental promover una visión integral de la persona, que contemple sus emociones, relaciones, aspiraciones, fortalezas y limitaciones.

María del Carmen Ortega, psiquiatra especializada en síndrome de Down y miembro del Comité Médico Asesor de DOWN ESPAÑA

La alimentación saludable, clave para el bienestar físico y cognitivo de las personas con síndrome de Down

Según evidencian las conclusiones del estudio europeo GO-DS21, en el que participan el Hospital del Mar Research Institute y el Centro de Regulación Genómica (CRG), “una buena alimentación y el ejercicio en las personas con síndrome de Down no solo reduce las comorbilidades como la obesidad, sino que mejora la percepción cognitiva”. Así lo explicó el doctor Rafael de la Torre, del Hospital del Mar, durante la presentación del estudio en marzo de este año con motivo del Día Mundial del Síndrome de Down.  

Los resultados de la investigación, en la que también participa la doctora experta en síndrome de Down y colaboradora de DOWN ESPAÑA, Mara Dierssen, indican que una dieta rica en verduras, proteínas de calidad, cereales integrales y grasas saludables es la más beneficiosa. Además, se destaca que los hábitos alimentarios de las familias influyen directamente en los de las personas con síndrome de Down. 

Teniendo en cuenta la demostrada importancia de una alimentación saludable para las personas con síndrome de Down a nivel físico y cognitivo, y que durante el verano es más complejo seguir los buenos hábitos, desde DOWN ESPAÑA, dentro de nuestra campaña ‘En verano me cuido #TanComoTú’, nos centramos estas semanas en fomentar la alimentación saludable.  

Después de haber compartido información y recursos didácticos y audiovisuales sobre consejos de salud generales idóneos para el verano, durante los próximos días, nos centraremos en difundir contenido divulgativo sobre la alimentación saludable y sus innumerables beneficios para las personas de nuestro colectivo.  

En palabras de Fernanda Albamonte, técnica de Programas de Salud de DOWN ESPAÑA, “el objetivo de esta campaña es animar a toda la familia a participar activamente en la creación de hábitos de vida saludables. Queremos que la actividad física, la alimentación equilibrada y la higiene diaria se conviertan en momentos de encuentro, aprendizaje y disfrute compartido”. 

Evitar las comidas pesadas, beber agua varias veces al día o reemplazar el consumo de bollería y alimentos ultraprocesados por opciones más saludables son algunos de los consejos clave en los que se centra ‘En verano me cuido #TanComoTú’.  

Gran parte del contenido informativo de los materiales ha contado con las aportaciones del grupo de adultos con síndrome de Down de la Red Nacional de Vida Adulta y Envejecimiento de DOWN ESPAÑA. 

Para más información sobre salud y alimentación de personas con síndrome de Down, descarga:

Entrevistamos al médico que “sabe hablar Down”

Entrevistamos al Dr. Fernando Moldenhauer, responsable de la Unidad de atención a adultos con síndrome de Down del Hospital Universitario de la Princesa (Madrid), para saber más sobre la realidad actual y futura de la salud de los adultos con esta discapacidad intelectual.

Durante la entrevista, el Dr. Moldenhauer nos cuenta por qué decidió empezar a trabajar con adultos con síndrome de Down, cómo surge la Unidad que dirige en el Hospital de la Princesa y  qué implica cuidar la salud de las personas adultas con síndrome de Down.

El envejecimiento precoz del colectivo y, sobre todo, las implicaciones que tiene el desarrollo del Alzheimer en los adultos con Down -el 100% de las personas con síndrome de Down, por circunstancias estrictamente biológicas y genéticas que existen en el cromosoma 21, desarrollaran Alzheimer a partir de los 50-60 años- centran buena parte de una entrevista en la que el Dr. Moldenhauer nos da algunas claves para entender mejor la etapa adulta de las personas con síndrome de Down.

En la entrevista, Fernando Moldenhauer nos cuenta también que, en estos momentos, están participando en el primer ensayo clínico de un fármaco anti alzheimer y se muestra confiado en que pronto haya resultados satisfactorios “para un colectivo que es el más afectado por esta enfermedad”. El doctor cree firmemente que en cinco o diez años el Alzheimer tendrá un tratamiento eficaz y, probablemente, para las personas con síndrome de Down ese tratamiento pueda llegar incluso antes.

No te pierdas la entrevista con el médico que, como le dijo la madre de una paciente, “sabe hablar Down”.

Nace el Plan Español del Cerebro

Esta mañana ha tenido lugar la presentación del Plan Español del Cerebro. DOWN ESPAÑA ha participado como organización miembro del Consejo Español del Cerebro.

El acto ha contado con la presencia de Eva Ortega, secretaria general de Investigación del Ministerio de Ciencia Innovación y Universidades; Pedro Gullón, director de Salud Pública del Ministerio de Sanidad; Tomás Cobo, presidente de la Organización Médica Colegial; Mara Dierssen, presidenta del Consejo Español del Cerebro; Mara Parellada, presidenta de la Comisión Nacional de Psiquiatría Infanto-Juvenil y Álvaro Hidalgo, presidente de la Fundación Weber.

Tomás Cobo, presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), ha iniciado la jornada y dado la bienvenida. Ha destacado algunos datos sobre la población afectada por trastornos cerebrales en nuestro país -por encima del 43%-, y ha insistido en la “creciente preocupación por la salud mental en España, especialmente, en la de los adolescentes”.

La secretaria general de investigación, Eva Ortega, ha destacado que la presentación del Plan es “mucho más que el lanzamiento de una estrategia porque se trata de un Plan para abordar uno de los retos más importantes que tenemos en nuestro tiempo”. Ortega ha señalado que “el 25% de la población va a tener a lo largo de su vida un trastorno mental por lo que, hablar del cerebro, es hablar de salud mental, pero, sobre todo de dignidad y de derechos”. La secretaria general de investigación ha señalado que el Plan Español del Cerebro es un “compromiso político, ético y humano con el bienestar de nuestra sociedad y un acto de responsabilidad colectiva”

Pedro Gullón, director general de Salud Pública y Equidad en Salud del Ministerio de Sanidad, ha insistido en “la importancia de poner el foco de la salud también en las políticas que no sean sanitarias”. Ha señalado que, desde el Ministerio de Sanidad “se está trabajando mucho en términos de prevención y calidad asistencial”.  

La neurobióloga Mara Dierssen, presidenta del Consejo Español del Cerebro, ha iniciado su intervención señalando que “el cerebro es nuestro bien más preciado. Es lo que nos hace humanos, nuestro motor de futuro. Sin salud cerebral no hay bienestar, no hay autonomía, no hay innovación. Y sin investigación no hay futuro”.

Dierssen ha destacado que “la prevalencia de trastornos cerebrales es hoy en día muy elevada y es previsible que vaya a aumentar en los próximos años. En consecuencia, la inversión que debe hacerse en salud cerebral debe ser proporcional al impacto real que tiene en la población”. Por ello, la investigadora ha señalado “estamos a disposición de las instituciones para ayudarles a definir las nuevas políticas relacionadas con la salud cerebral que se quieran impulsar y para mejorar las existentes”. “La salud cerebral no ha sido hasta ahora una prioridad política pero ahora necesitamos que lo sea porque la salud cerebral no es solo una cuestión médica sino una cuestión de futuro”, ha afirmado.

Además, la experta ha resaltado la importancia de la investigación: “no podemos mejorar la atención a los pacientes ni los tratamientos, sin conocer el funcionamiento del cerebro. Debemos tener las claves para poder prevenir, porque la prevención es fundamental ya que, hasta un 30% de los trastornos cerebrales, se podrían evitar con una buena prevención. Por ello -ha afirmado Dierssen- tenemos que invertir en tratamiento y garantizar el acceso equitativo de toda la población, independientemente de sus circunstancias personales, sociales o económicas, no pude ser que la atención dependa del código postal”.

“Queremos una España donde la salud cerebral sea un derecho y no un privilegio y donde la investigación sea una prioridad sostenida, no una excepción puntual”, ha concluido la neurobióloga.

La Dra. Mara Parellada, presidenta de la Comisión Nacional de Psiquiatría Infanto-Juvenil, ha presentado el contenido y alcance del Plan Español del Cerebro no sin antes mencionar que “por cada persona que tiene un trastorno neurológico hay varias personas comprometidas con lo que, al final -ha asegurado- toda la población española se ve afectada”.

Parellada ha enumerado los cinco ejes clave sobre los que el Plan Español del Cerebro plantea su estrategia para transformar el abordaje de las enfermedades cerebrales en España.

Estos son:

-Datos y evaluación del impacto.

-Atención clínica equitativa y sostenida.

-Impulso a la investigación neurocientífica.

-Promoción y prevención de la salud cerebral

-Participación del paciente y la sociedadr

La presentación ha concluido con las palabras de Álvaro Hidalgo, de la Fundación Weber. Ha centrado su intervención en el impacto económico que tienen las enfermedades cerebrales. Hidalgo ha señalado que “la salud cerebral es importante, también, desde el punto de vista económico. Si no lo medimos adecuadamente, no lo abordaremos ni le daremos la importancia que tiene”.

El acto ha finalizado con un llamamiento a las administraciones públicas, al sector privado y a la sociedad civil para sumar esfuerzos en la implementación de esta estrategia y con la petición de que el Plan se traduzca en políticas efectivas y sostenibles.

Un Plan que también impulsa la salud cerebral de las personas con síndrome de Down y su mejor envejecimiento.

Desde DOWN ESPAÑA, celebramos la aprobación de este Plan del Cerebro porque además de actuar como un marco estratégico, integrador y basado en la evidencia, representa una oportunidad clave para visibilizar y seguir impulsando las áreas fundamentales de la vida de las personas con síndrome de Down. Desde la atención temprana y su impacto en el neurodesarrollo, hasta el fomento de habilidades funcionales y hábitos de vida saludables y la enfermedad del Alzheimer, que tiene una alta prevalencia en las personas de nuestro colectivo.

Este plan visibiliza la necesidad de un enfoque holístico y personalizado, que contemple las múltiples variables contextuales que inciden en el desarrollo de las personas y que permita avanzar hacia una verdadera inclusión en salud y calidad de vida para las personas con síndrome de Down y sus familias.

Accede al Plan Español del Cerebro haciendo click aquí.

Actualización de información médica sobre el síndrome de Down

Los doctores José María Borrel, María del Carmen Ortega, Francisco Tomás, Fernando Moldenhauer y Rafael Fernández-Delgado, miembros de nuestro Comité Médico Asesor, han publicado en la revista científica Science Direct una actualización sobre la práctica médica de pacientes con síndrome de Down.

En ella, los expertos detallan información médica dirigida a profesionales sanitarios sobre la salud de las personas con síndrome de Down en las diferentes etapas de sus vidas.

Además, el diagnóstico, la salud mental y las últimas investigaciones relacionadas con las expectativas de futuro de las personas del colectivo son otros asuntos destacados en la publicación, que ha contado con la colaboración de la Dra. Pilar López, el Dr. Eduardo Moreno, también miembros del Comité Médico Asesor de DOWN ESPAÑA, Lic. Fernanda Albamonte, técnico de Programas de Salud de DOWN ESPAÑA, el Dr. José Antonio Salvador, de la Universidad de Zaragoza y el sociólogo Agustín Huete de la Universidad de Salamanca).

El resumen de la actualización descrita está disponible en este enlace (durante 50 días): https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S1134207225000568#preview-section-snippets

Down España y la AEC se unen para mejorar la atención sanitaria de las personas con síndrome de Down

«El síndrome de Down no es una enfermedad, sino una condición genética que puede implicar la prevalencia de numerosas enfermedades y dolencias asociadas en muchas personas. Por ello, requiere un acento médico muy relevante”, indica Agustín Matía, director gerente de DOWN ESPAÑA.

Teniendo en cuenta esta realidad, desde DOWN ESPAÑA trabajamos en convenios con colectivos médicos que ayuden a mejorar la atención sanitaria de las personas con síndrome de Down y sus familias. Uno de ellos es el acuerdo de colaboración que hemos formalizado con la Asociación Española de Cirujanos (AEC) para promover la inclusión de las personas con síndrome de Down en el ámbito de la cirugía y mejorar su acceso a una atención sanitaria de calidad.

Este convenio establece un marco de cooperación para el desarrollo de actividades conjuntas, como la elaboración de materiales educativos accesibles, claros y comprensibles, dirigidos tanto a pacientes como a profesionales sanitarios, con el fin de fomentar la sensibilización, eliminar barreras comunicativas y mejorar la atención centrada en la persona.

Además, contempla la formación continua y especializada de los profesionales del ámbito quirúrgico, con el objetivo de garantizar un trato digno, seguro y adaptado a las necesidades específicas de las personas con síndrome de Down.

Asimismo, el acuerdo incluye el impulso de iniciativas que promuevan la autonomía, la participación activa y la plena inclusión de estas personas en todos los entornos, con especial atención al ámbito sanitario y quirúrgico.

“Para la Asociación Española de Cirujanos, establecer un acuerdo con Down España significa una gran oportunidad para seguir una de las líneas de trabajo que más nos interesan: el contacto con nuestros pacientes, conocer sus opiniones e inquietudes, intercambiar información y hacer que la cirugía se acerque cada vez más a los pacientes que la necesitan« señala Salvador Navarro, presidente de la AEC.

Por su parte, Agustín Matía, director gerente de Down España, destaca que «la importancia de este tipo de acuerdos descansa en la capacidad de que la sociedad civil (organizaciones de pacientes y de familias de personas con discapacidad) pueda participar, implicarse y ayudar a mejorar la atención médica a las personas vulnerables. Poder asegurar un papel activo de los pacientes ayuda a fortalecer la confianza en la profesión médica, algo esencial en discapacidades como el síndrome de Down”. 

“Muy habitualmente desde el ámbito médico se ve al síndrome de Down y a la persona con síndrome de Down a la luz del diagnóstico médico y del prejuicio. Debemos cambiar este enfoque tan limitado. La persona con síndrome de Down es un paciente diferente en muchos aspectos, pero su singularidad no debe esconder su humanidad. Acuerdos de este tipo facilitan que el factor humano personal sea la faceta dominante en su atención médica y en su paso por nuestros hospitales… como debe ser”, añade Matía.

Además, el doctor José Luis Muñoz, coordinador del Grupo de Relación con los Pacientes de la AEC, asegura que “en los últimos años, hemos visto cómo la propia legislación española ha evolucionado hacia una posición mucho más inclusiva y de respeto por la autonomía de las personas con síndrome de Down y, en general, con discapacidad intelectual. Desde la Asociación Española de Cirujanos, hemos querido acercarnos a ellas y apoyarles para lograr alcanzar esta autonomía, permitiéndoles ser partícipes activos en todas las decisiones que afecten a su salud. Para ello, creemos que es fundamental mejorar la accesibilidad de la información médica. También creemos que será importante realizar un trabajo de sensibilización y formación entre los profesionales, para aportar recursos y habilidades que les faciliten la atención sanitaria de estos pacientes. Por último, cabe reseñar que estamos trabajando en la misma línea con personas con discapacidad auditiva y visual”.

Con este convenio, tanto la AEC como Down España reafirman su compromiso con la inclusión, la equidad y la mejora continua de la atención sanitaria, trabajando conjuntamente para construir un sistema más accesible, justo y respetuoso con la diversidad.

Garantizar el derecho a la salud de las personas con síndrome de Down exige unidades médicas especializadas

Desde hace casi dos décadas, el Hospital Universitario de La Princesa de Madrid cuenta con una Unidad de Atención a Adultos con Síndrome de Down, referente nacional cuyo modelo ya se está replicando en otros hospitales de España.

Según nos explica su responsable, el médico internista Fernando Moldenhauer, esta unidad, que ofrece una atención integral a más de 300 pacientes al año, surgió sin la intención de marcar un hito. “No intentamos hacer algo que no hubiera hecho nadie, sino que pensamos que era útil y nos dimos cuenta de que era una iniciativa pionera que no existía ni en España ni, probablemente, en el resto del mundo. Era una experiencia única”.

La utilidad de esta unidad específica y de aquellas que siguen su ejemplo se basa en que las personas con síndrome de Down “tienen suficiente complejidad médica como para requerirlas, al igual que sucede en muchos otros casos como con el VIH o enfermedades raras”, afirma Moldenhauer.

“No debemos poner calificativos antes de que un paciente entre a la consulta. Es decir, si entra ya diagnosticado, habremos escogido un camino antes de tiempo. Sin embargo, es cierto que las personas con síndrome de Down tienen una condición genética que puede conllevar una serie de problemas de salud y sus circunstancias son las que llevan en su “mochila”, como lleva cualquier otro paciente que acude a una consulta”, argumenta el experto.

De acuerdo con las palabras de Moldenhauer, en un servicio de salud público debe darse “la justicia distributiva”, un principio que de inicio defiende que a cada persona se le ofrezca lo que realmente necesita. “Esa es la piedra angular de nuestro sistema sanitario porque, si no fuera así, no habría personas en diálisis, que es enormemente cara, por ejemplo. Si una persona con síndrome de Down necesita unas determinadas atenciones desde el punto sanitario deben dársele, independientemente de lo que eso cueste”, añade.

Por otro lado, el notable aumento de la esperanza de vida de las personas con síndrome de Down exige una adaptación del sistema sanitario para garantizar su derecho a una atención médica de calidad.

En definitiva, Moldenhauer y el doctor Diego Real de Asúa, también responsable de la Unidad del Hospital de La Princesa, reivindican la necesidad de estas unidades de referencia en las que no solo se tratan patologías atendidas por el especialista correspondiente, sino que también se realiza un seguimiento personalizado y se adapta el entorno hospitalario para que sea accesible, humano y respetuoso con sus necesidades. Es decir, son consultas que funcionan como «puerta de entrada» en las que profesionales médicos con conocimiento experto del síndrome de Down atienden, derivan y orientan al especialista médico correspondiente que les trata de forma inclusiva y normalizada dentro del sistema hospitalario.

Afortunadamente, en los últimos años, varios hospitales han puesto en funcionamiento consultas dedicadas a la salud de las personas adultas con síndrome de Down.

En Málaga, el Hospital Regional Universitario acaba de anunciar una unidad multidisciplinar, liderada por el servicio de Medicina Interna, con el objetivo de mejorar la prevención y detección precoz de enfermedades asociadas a este colectivo.

Por su parte, en La Rioja, el Servicio Riojano de Salud (SERIS) está implementando un circuito de atención médica específico para adultos con síndrome de Down para facilitar la detección temprana de problemas de salud asociados al síndrome con un protocolo de derivación a Medicina Interna y Neurología. ​

Desde DOWN ESPAÑA, consideramos prioritaria la creación de consultas especializadas como las mencionadas para brindar una atención médica integral y adaptada a las personas adultas con síndrome de Down para atender sus necesidades particulares y mejorar así su calidad de vida. Además, estas consultas favorecen el aumento del conocimiento clínico experto del síndrome de Down y facilitan el diagnóstico de patologías comunes.

Publicaciones recomendables sobre la salud de las personas con síndrome de Down:

Cuidados de enfermería en las personas con síndrome de Down

Programa Español de Salud de personas con síndrome de Down

Mi salud primero: consejos para una vida sana, dirigida a personas con síndrome de Down.

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