Educación24 Feb 20122 minutos de lectura

160 personas se beneficiarán de un programa con el que mejorarán sus relaciones afectivo-sexuales

El programa se ha diseñado para que esté orientado tanto a personas con síndrome de Down y discapacidad intelectual, como a sus familias y al equipo profesional que trabaja en las entidades.

Una cuestión de derecho

Según afirmó el presidente de DOWN GALICIA, Delmiro Prieto, «nuestro reto consiste en reconocer y respetar los tiempos de crecimiento de las personas con discapacidad y en saber aceptar una condición de adulto en vez de una eterna infancia. Defendemos el derecho de las personas con discapacidad a tener un proyecto de vida, y en ese proyecto de vida debe contemplarse el derecho a formar una pareja y a tener una vida afectiva plena».

Delmiro Prieto resaltó la necesidad de luchar contra mitos y prejuicios que restringen y limitan el círculo afectivo de las personas con síndrome de Down y la necesidad de facilitarle modelos y enseñanzas personales y sociales acordes con sus etapas vitales y el entorno en el que viven.

Protagonistas de sus propias relaciones

En un contexto en el que se van logrando avances en inclusión social, sobre todo en los ámbitos escolar y laboral, las personas con discapacidad intelectual amplían su mundo de relación y tienen más recursos, por lo que es preciso ofrecerles tanto a ellos como a sus familias los recursos necesarios para que se conviertan en sujetos activos de sus propias relaciones afectivas.

En este sentido, Delmiro Prieto explicó la necesidad de considerar la educación en este ámbito como un eslabón más en su inclusión social de cara a favorecer la autonomía personal de este colectivo, ayudándoles a aceptarse y a entender sus sentimientos, a elegir, a compartir y a interesarse por los demás.

Esto se cerrará en 0 segundos