El contrato ha sido posible gracias a un convenio de colaboración firmado entre DOWN MÉRIDA, la Fundación Konecta y la guardería emeritense. Se busca impulsar la contratación de las personas con esta discapacidad intelectual, así como la búsqueda activa de oportunidades laborales para el colectivo.

Los jóvenes comenzaron a trabajar el pasado 9 de junio y estarán en sus puestos hasta el próximo mes de septiembre. En ese tiempo trabajarán con niños de entre 0 a 3 años en este centro infantil que atiende a más de 70 niños.

Según la entidad, la experiencia está siendo «sumamente satisfactoria y gratificante» para los jóvenes, así como para los «propios niños y niñas» de la guardería, que «disfrutan de la novedad de convivir con personas con otras capacidades».

Durante este tiempo realizarán tareas como el orden y organización de las mochilas y las pertenencias de los niños, apoyo en actividades didácticas como cuentacuentos o en el momento de entregar los niños a sus padres, dar biberones, ayuda en cocina, entre otras.

La adecuación al puesto se produce a través de la metodología de Empleo con Apoyo, mediante el cual se cuenta con un preparador laboral que va retirando el apoyo inicialmente continuo.